No quiero a mi mamá.
Quiero estar con ella. No quiero vivir con mi tía, quiero estar con mi mamá.
Cuando vivía con mamá, era genial, me gustaba cuando jugábamos al escondite. Poco antes de
que mi papá llegara a casa, siempre me decía que si me apetecía jugar al escondite. Ella siempre
se la ligaba y yo me escondía en el armario de la habitación de mi abuela. Tenía que hacer poco
ruido porque mi abuela estaba enferma. Cuando mi mamá me encontraba me abrazaba y me
daba besos.
Yo no salía de mi escondite hasta que ella no llegaba y me encontraba. Me gustaba abrazarla,
pero me decía que no le apretara con fuerza, porque siempre le dolía algo. Unas veces era el
hombro, otras el pecho y otras veces la espalda. Como yo no le quería hacer daño nos
chocábamos los cinco y así no hacía daño a mamá.
Una vez papá llegó a casa y nos pilló viendo la tele, mamá me guiñó el ojo, era nuestra señal
secreta para que me escondiera. Oía voces desde el armario y mamá no venía.
Tenía ganas de hacer pis y tenía que salir. Papá no estaba y no encontraba a mamá. Fui a su
habitación y estaba en la cama, acostada encima de la colcha. La llamé pero no me respondía....
me acosté a su lado, estaba medio desnuda y tenía esas manchas negras en la piel que decía que
eran el color del amor. Yo no sé que quiere decir eso, quiero mucho a mi mamá pero no quiero
que le salgan esas manchas.
Mamá no se levanta de la cama y yo no me muevo de su lado.
Ha llegado mucha gente a casa y mi tía me ha llevado con ella. Yo no quiero vivir aquí.
Mi tía dice que por querer mucho no salen esas manchas en el cuerpo.
Insulta a mi padre y no para de darme besos y llorar.
Yo quiero estar con mi madre, pero mi tía dice que se ha ido de viaje y que va a tardar un tiempo
en volver.
¿Por qué no me ha llevado con ella?
¿Dónde está mi padre?
Yo quiero estar con mi madre, ¿por qué no viene a por mí?
La echo mucho de menos.
¿Ya no me quiere?
David..ufffff.¿Qué decirte?Ya lo has dicho todo con esta conmovedora historia.¿Hasta cuándo seguiremos así?¿Cuántas mujeres han de morir para que cambien las leyes?No puedo más que darte la razón,ya que seguiremos así y ojalá que todo cambiase,pero mucho me temo,que seguiremos en las mismas.
ResponderEliminarLo has bordado,David.Te felicito.
Mi abrazo más sincero para tí.
Cuídalas mucho¿Sí?
Mil besos.
Morgana.
Uff, se me encogió el corazón. Como relato es muy bueno, pero como realidad que tengan que sufrir tantas criaturas es horrible. Y eso debe quedar siempre en la cabeza, es horrible.
ResponderEliminarAbrazos¡
Impecable retrato de una crueldad gratuíta y mucho más común de lo que queremos reconocer. ¿cuantas madres lucen esas señales de amor y no las queremos ver?
ResponderEliminarEl maltratador pierde cualquier derecho sobre sus hijos, ¿es tan dificil de entender?
Un saludo
No hay nada más que decir.
ResponderEliminarMorgana
ResponderEliminarNo entiendo por qué no cambian o mejor dicho se endurecen las leyes para estos asesinos.... bueno para todos los asesinos. No lo entiendo, miles de besos también para ti.
Jota
Es algo horrible pero que está a la orden del día, es una lástima para la mujer que muere, que al final es la que pierde.
Pero quién se acuerda de esos hijos, muchos de ellos en edad preescolar??
Pilar
ResponderEliminarCuando le enseñé el relato a mi mujer me dijo lo mismo, que era muy fuerte y que no presentara ese escrito al concurso de Respirando.
Pero es que llevo mucho tiempo pensando en esos niños de los que nadie se acuerda.
Tengo que decir que si se me diera mejor escribir hubiera sido mucho más desgarrador.
Besitos.
Dany
ResponderEliminarMe alegro verte por aquí.
Muchos besitos, por lo que veo estamos de acuerdo.
David,escribes con el corazón y eso es lo verdadramnte importante.
ResponderEliminarBesos.
David,de envidia nada.Todo es ponerse.Cuando quieras lo planificamos.
ResponderEliminarBesazos.
uff yo no puedo leer estas cosas xq ahora se me keda el mal cuerpo para lo ke keda d dia.. dsd luego como relato es muuuy bueno!
ResponderEliminarun bso! feliz semana
Mierda, David¡¡¡ Me ha encantado tu post no por lo literario solamente, paso de cualquier crítica, sí por su contenido.
ResponderEliminarEl tema de la violencia contra la mujer es algo que va mas allá de las leyes. Es algo que muchos prefieren "no ver", aunque luego cuando lo ven por TV opinan "qué feróz, qué horrible". En muchos casos quienes más lo hacen, son las propias mujeres, fíjate. Las propias víctimas son quienes menos quieren "ver" su realidad por temor a perder lo "poco" o "mucho" que tienen, pues esto no se da solo en las clases mas empobrecidas.
Mira, sin temor a que me tomen por entrometida siendo yo foránea: estando en el año 2007 tomando un café en vuestra Plaza Mayor, se han sentado al lado de mi mesa una pareja ya madura, con dos jóvenes que luego de escuchar la conversación, constaté eran sus hijos. El modo en que el hombre agraviaba a la mujer, los gritos que profería para que no hubiese turista que no se enterase del diferendo entre ellos, no quieras saberlo¡¡¡ Es que mira, me he levantado para "interceder", ya que sus hijos entre sí, solamente comentaban "esto no terminará jamás"; "esto es más de lo de siempre"; "qué verguenza", etc. Finalmente pensé que, por sus hijos, sería peor mi intervención, por lo que decidí no meterme. Ahora, el año pasado viví por dos meses en Vigo y los informativos todos los días sacaban una noticia o más POR DÍA de estos casos. Lamentablemente, la situación económica adversa tiene mucho que ver en este tipo de psicóticos, pero por desgracia, las leyes poco pueden hacer cuando es la propia mujer -sobretodo las mas mayores- quienes no se atreven a denunciar. Somos nosotros mismos, desde nuestro lugar, desde el mas pequeño sitio de trabajo que, en forma individual, podemos ayudar a estas personas que viven con miedo.
Por eso insisto tanto con mi hija que tiene 16 años: si al salir con un chico, nota una alzada de voz solamente, a la puta calle¡¡¡
Enhorabuena por tí, David, al tomar coraje y hablar de éste tema tan caro en tantos sentidos. Ya votaré donde dices, pero independientemente de ello, te tienes ganado mi afecto y mi respeto.
Un besazo, hermoso y dos mas para tus mujeres
ufff.. qué duro David, qué duro y, por desgracia, qué real.
ResponderEliminarSupongo que la pregunta es ¿hasta cuándo??... Ojalá algún día dejemos de hacer este tipo de post ¿verdad?? será buena señal.
Un besazo!
Que sobrecogedor!! Te ha quedado muy bien el relato. No te voy a decir que me encanta porque no me gusta leer cosas tan tristes...
ResponderEliminarHas conseguido que nos emocionemos al leerlo y nos acordemos de esos pobres niños, que es lo importante!
Ojalá alguno de esos malnacidos puedan leerlo, y les haga reflexionar
ResponderEliminarQue fuerte lo escrito y que dolor causó al leerlo.
ResponderEliminarDavid, te agradezco tanto por haberlo compartido en mi blog.
Creo que este concurso, no solo sirvió para conocernos mas entre todos, sino para tomar conciencia en muchos aspectos.
Mis felicitaciones y nuevamente mi agradecimiento por abrir tu corazón y hacernos recordar que esta realidad tan dura, no solo es un relato.
Besos
Nieves
ResponderEliminarSiento mucho haberte puesto mal cuerpo, besitos
Zully
Haces bien en inculcar a tu hija que no tiene porqué aguantar una maltrato por pequeño que sea ya que así se empieza, por perder el respeto e insultando.
Es duro para la mujer maltratada denunciar ya que están atemorizadas u anuladas mentalmente.
Alma
ResponderEliminarMucho me temo que no acabaremos con esa lacra, se pueden tardar varias generaciones hasta que se consiga que haga efecto toda la campaña contra el maltrato.
Irune
Es un relato triste pero que refleja, de refilón, lo que es la realidad.
Respirando
ResponderEliminarGracias a ti por realizar este concurso, ojalá este relato fuera ficticio y no fuera un relato que para mucha gente es algo real,
Pues yo creo que es simplemente SENSACIONAL
ResponderEliminarY describe perfectamente y ocn mucho gusto la lacra de esta sociedad.
Enhorabuena David.
Un besete
Querido Amigo.. esta conmovedora historia, es por desgracia la de tantos otros niños. La Violencia Familiar es un problema social, afecta a un alto porcentaje de familias de cualquier comunidad, en todos los niveles culturales
ResponderEliminarSe trata de relaciones que implican un abuso de poder de quien ejerce maltrato.Duele aun mas cuando son los hijos los que sufren su resultado. Debio ser muy duro para Ti,plasmar semejante dolor.
Un enorme beso David.
TERRIBLE!
ResponderEliminarNo puedo decirte más xq tengo un nudo en la garganta y como líe verás.
Un beso fuerte David.
Un post de diez.
Hola mi eterno David vengo de leer tus entradas, ya sabes no he estado pero empiezo poco a poco a estar...
ResponderEliminarLo mejor de tu blog es que tus estimulas a tus lectores a la reflexión y a la catarsis, a veces los comentarios son tan buenos que serían acreedores de un post por si mismo ...
El tema que hoy tocas me hizo enfocarme en el niño, como consecuencia de la violencia domestica, ningún niño merece tener este tipo de experiencia, lo peor es que quizás la repita,es lo que conoce ...
Pides leyes más fuertes, no creo que esa sea la solución, el problema es de educación y eso comienza por casa, una buena campaña de concientización dirigida a los niños, y una sociedad sensibilizada en fin muchas cosas se podrían decir al respecto... perdóname por haber llegado tarde para votar por ti en el concurso lo siento que pena te quiero un monto al café?
Cactus
ResponderEliminarMuchas gracias, me alegro que te haya gustado.
Emylia
Afecta a todo el mundo, la violencia no distingue nivel cultural ni clase social.
Me da la sensación que piensas que escribo este relato basándome en mi propia experiencia y por fortuna nada más lejos de la realidad. Mi padre murió hace dos años rodeado de todos sus hijos porque le adorábamos.
Este relato está sacado de mi imaginación y de ver que en las noticias nadie se acuerda de esos niños.
Teta
ResponderEliminarEspero que ese nudo se desate, jajaja
Es triste pero es la realidad. Me alegro que te haya gustado. Besitos.
Bichi
Me alegro mucho verte de nuevo por aquí.
Llevas toda la razón, creo que la clave está en la educación y en campañas contra la violencia de género, aunque sigo pensando que con los asesinos tolerancia cero.
Me voy para allá a por ese café. Muchos besos
DAVID,mi lado oscuro a veces sale aunque no lo desee.Vas adelantando puestos en el concurso.Te enviaré mis buenas vibras.
ResponderEliminarBesos.
Hay que controlarlo, que si no puede hacer cosas de las que luego nos podemos arrepentir.
ResponderEliminarNo esperaba tener ningún voto así que yo ya he ganado. Besitos.
Intenta sufrir un poco menos.
ResponderEliminarGracias amigo, tres besos, chimo
Eso es lo importante Chimo, no sufrir o sufrir lo menos posible. Pero para eso habría que ser de piedra.
ResponderEliminarBesos para vosotros.
Hola David! Perdona por tardar tanto en comentarte, pero bloguer se volvió loko estos días y no era capaz de comentar ningun blog!!!.
ResponderEliminarMe hiciste llorar con este relato, pero mucho mucho! Según lo leís me puse en la piel de ese niño, y lo volví a leer y me puse en la piel de la madre...y no sabría decirte cual de las dos posturas me parece más dolorosa...lo unico que se, es que esto tiene que parar de una forma u otra, que no hay derecho! Que no lo entiendo, que me revuelve las tripas saber que hay gente así en el mundo...Que por desgracia el tema me toca muy cerca, tanto, que estoy luchando con una amiga para que supere a su expareja, al que dejó hace unos meses pero se empeña en visitarla todas las semanas con un bate de beisbol, a la que ha denunciado a su agresor, y él le ha devuelto la denuncia por amenazas verbales según él... la que está muerta de miedo, y lleva cuatro ojos puestos todo el día por si acaso... la que tiempa y grita cuando la sorprendes, la que se sintió culpable durante mucho tiempo, la que no quería escuchar nuestra visión de su realidad y que cuando fue consciente ya llevaba tiempo curandose heridas en silencio... En fin, ojala esto termine algún día, porque no hay derecho!!! Un besazo!!!